La villa de Arlanzón, a 20 kilómetros al este de Burgos, se encuentra en una encrucijada entre los llanos de la provincia de Burgos y la parte meridional de la Sierra de la Demanda; el municipio integra también al barrio de Villamorico y a las entidades locales menores de Galarde, Zalduendo, Santovenia de Oca y Agés.
Su historia comienza, según los documentos escritos más antiguos, en el siglo X; ya se cita en el año 921 y es muy probable que su origen se sitúe en las primeras épocas de la repoblación cristiana de la Alta Edad Media, entre los años 850 y 950. Seguramente la población se asentara alrededor del castillo situado en el roquedal de San Miguel, donde hoy en día se alza su iglesia románica, del siglo XII.
Durante siglos Arlanzón ejerció como capital de comarca -en aquella época cabecera de un alfoz-, situándose al frente de más de 40 municipios. Como tantas otras villas de la provincia de Burgos, Arlanzón pasó a ser propiedad del Monasterio de Las Huelgas en 1192. Es una localidad cuya economía se mantiene por la agricultura, la ganadería y las pequeñas industrias para mantener la prosperidad a su población.